
Qué se forma al Mezclar pintura Violeta con otros colores
Tal vez conozcas colores como púrpura, morado, índigo, lavanda o malva. Todos estos forman parte de la familia de los violetas. Es un color secundario que se ...Leer más
Categoría: Color Violeta, Colores de pintura
Conoce la gran familia de colores violetas y morados, toda la variedad de matices violáceos que se extiende desde el rojo al azul, cada uno con sus nombres y características particulares.
Tal vez el violeta, el morado y el púrpura sean los colores más populares de esta familia de colores, que se extiende entre los rojos y los azules. Lo cierto que las tres tonalidades no son lo mismo, sino que también son tres variantes especiales. Veamos algunas de ellas:
Se trata de un color púrpura azulado, que debe su nombre a la flor de la planta violeta común. Dentro de la familia de pueden haber otras tonalidades conocidas. Una de las cualidades del violeta es la elegancia, cualidad que transmite a cualquier lugar y situación en donde se lo utilice.
El origen de su nombre está en la pigmentación de las moras, frutos del árbol moral negro. Se trata de una tonalidad púrpura oscura y profunda. Sin duda un color para usar con prudencia, aunque con un resultado muy elegante.
Los púrpuras son algunos colores semejantes que se encuentran entre el violeta y el rojo carmesí. Algo así como una tonalidad de color magenta oscuro. Son variantes intensas que no pasan desapercibidas, recomendadas en pequeñas superficies.
Por otra parte el borgoña es una coloración roja oscura, cercana a las tonalidades púrpuras. Éste color tiene su origen en los vinos franceses exclusivos de la región del mismo nombre. Los colores semejantes al borgoña, como vino tinto y bordó, son muy usados en decoración de interiores.
Toda familia de colores tiene sus matices grisáceos, en este caso un violeta agrisado se trata de una tonalidad grisácea del violeta. Es un color apagado o neutralizado que deja ver sutilmente sus matices violáceos. Es así que luce un aspecto más rústico o discreto que sus semejantes.
Estamos en presencia de un color icónico de la espiritualidad que se conoce con dos nombres, añil y también índigo. Se trata de un violeta muy cercano a las tonalidades azules, además intenso y oscuro. Sus cualidades lo hacen ver distinguido, y combina perfectamente con blanco roto, azules, acabados metálicos y maderas.
Esta es una colocación clásica en la decoración de interiores, muy agradable y además muy fácil de combinar. La familia de colores lavandas son tonalidades pálidas del violeta, algunas de ellas agrisadas. El color lavanda genera un aspecto fresco y rejuvenecido.
Un color morado suave que toma su nombre de las flores de arbusto conocido como lila. Es semejante a otras tonalidades de la familia, como el lavanda y el malva. Sin duda una variante delicada y especial para pintura de interiores.
Estamos en presencia de una coloración casi rosada de los violetas, muy suave y de apariencia delicada. El malva es un término medio entre el color lavanda a y el rosa. Su tonalidad y brillo lo destacan como delicado, femenino y juvenil, especial para un cuarto de niña o adolescente, pero puede ir perfecto en otros ambientes y situaciones.
Aquí tenemos un color medio entre el púrpura y el violeta, moderadamente saturado, y con una brillo medio (ni suave, ni tampoco oscuro). Toma su nombre del mineral o piedra amatista, una variante violeta y las más valiosa del cuarzo.
Este color se basa en las variantes de uva tintas, más intensas y oscuras. Algunos tonos similares al uva son Berenjena, Ciruela o Arándano. Son las tonalidades más oscuras que podemos encontrar en la familia de colores violetas y morados.
Puede que algunas de las tonalidades anteriores no coincidan con las cartas de colores o con tu apreciación del mismo. Recuerda que estos nombres son lo que habitualmente se usan para identificarlo, pero no son exactos. Para ello deberían tener un código único.
Toda la gama de colores violetas, morados y púrpuras son una extensa y variada familia, con tonalidades suaves y oscuras, pero también apagadas e intensas. Todas estas coloraciones tienen características únicas y particulares.
Pero en general si tenemos que definirlos, diremos que son colores delicados, elegantes y distinguidos. Esto último debido a que no pueden pasar desapercibidos en donde sea que se los utilice, ya sea en la pintura, la decoración, la vestimenta o el diseño.
Si pretendes usar alguna tonalidad violácea o morada, debes usarla con sabiduría, teniendo conocimiento de cómo combinarla, y estando completamente seguro de qué tono es el más adecuado.
Los purpuras, morados y violetas combinan adecuadamente con colores neutros. Entre ellos se destacan los blancos, grises suaves y medios, y beiges y arenas.