Seguramente que si estás por armar tu salón por primera vez, o si quieres redecorarlo a nuevo, lo primero que eliges es el sofá o los sillones que usarás, está claro… es el mueble principal de este ambiente. Te tomas el tiempo de escoger el tamaño que más te conviene para el espacio disponible, el diseño que va más con tu estilo, pero el color puede ser un problema, especialmente para los más indecisos.
Y es que en el mercado hay cientos de diseños para elegir, sea un sofá, una butaca, un long-chair, o un sillón de relax. Muchas tiendas nos ofrecen gran variedad de diseños, de buena calidad y a un buen precio. Pero tenemos claro que no hay que elegir cualquier color, veamos por qué:
¿El sofá debe combinar con la decoración?
Está bien que el sofá combine con los colores del salón, pero que no sea un motivo para que compres algo que no te guste. Ésta es una adquisición eventual que suele costar un dinero que no sobra. Si tienes que pintar con un nuevo color las paredes para que combine, no habría problemas. Tienes opciones para combinar las paredes incluso con un sofá amarillo o un sofá rojo.
En el caso de que tengas otros muebles y elementos que no cambiarás, puedes escoger un color neutro o uno que se adecue, que no necesariamente debe ser el mismo que el resto del mobiliario.
¿De color vibrante o neutro?
Esto está muy ligado al carácter que pretendes reflejar en el ambiente, debido a que los colores crean sensaciones e influyen sobre nuestros estados de ánimo.
Los colores vibrantes son alegres y muy atractivos, pueden ser el centro de las miradas de tu salón. En contra tal vez cansen con el tiempo y decidas cambiarlo con anterioridad. Si quieres utilizar un color intenso tienes que ubicar otros elementos en tonalidades similares en el resto del espacio para crear un equilibrio visual.
Por otra parte los neutros, como los blancos, los grises o las tonalidades tierra se adaptan mejor a cualquier espacio. Si quieres sumar un poco de color puedes agregar cojines coloridos, siempre y cuando el estilo de tu sofá lo permita.
¿Liso o estampado?
Esto está también muy ligado a tus gustos. Hay personas que prefieren los estampados, donde tienes más colorido y formas, lo que a veces puede ser más vistoso, pero con más limitaciones en cuanto estilo en general. Puedes escoger desde las clásicas florituras, pasando por diseños más modernos de cuadros o a rayas, hasta el patchwork. Por otra parte los tapizados lisos, o de colores, sólidos se adaptan mejor a cualquier estilo.